Para muchos trabajadores independientes de Chile esta es una pregunta que no siempre tiene una respuesta clara. A veces se cobra la cantidad que fija la “competencia”, en otras se establece un monto al azar y en otros casos, se termina por trabajar más de lo que se recibe a cambio.
Calcular tu valor por hora no solo es una forma de poner precio a tu tiempo, sino también de reconocer el esfuerzo, preparación y dedicación que pones en cada servicio. Entender este cálculo te permitirá tomar mejores decisiones, negociar con mayor confianza y evitar la sensación de trabajar sin la retribución justa.
Por esta razón, elaboramos el siguiente blog para explicarte de manera sencilla cómo definir tu tarifa por hora bajo el contexto actual económico de Chile.
Cuando trabajas por cuenta propia o diriges un negocio, tu tiempo se convierte en uno de los recursos más valiosos. Cada hora que inviertes en un proyecto, asesoría o servicio de cualquier giro no solo implica el trabajo realizado, sino también todo lo que hay detrás: tu experiencia, preparación, herramientas y energía.
Conocer tu valor hora te ayuda a:
Antes de empezar con los cálculos para establecer tu tarifa, es importante considerar los factores para puedas realizar cada trabajo y los recursos que implica para así poder establecer una tarifa.
Para saber cuánto deberías cobrar, basta con aplicar una fórmula sencilla que combina tus gastos, tu ingreso esperado y las horas que realmente puedes facturar:
(Gastos mensuales + Sueldo deseado) ÷ Horas efectivas de trabajo = Valor hora
Con esto ya tienes un punto de partida claro. Ahora veamos cómo aplicarla en la práctica.
Este proceso es rápido y, si lo actualizas cada cierto tiempo, te dará una visión más realista de tu negocio.
Ahora que te hemos explicado la teoría, es momento de llevarla a la práctica con este ejemplo que ilustra todo lo explicado anteriormente.
Imaginemos a una diseñadora freelance que trabaja en Santiago.
El sueldo que le gustaría percibir para vivir de manera tranquila son $1.000.000 líquidos.
Sus gastos mensuales que están relacionados con el trabajo son: arriendo de cowork $150.000, internet $25.000, software $20.000, transporte $55.000 = $250.000.
Sus horas efectivas trabajadas son 40 a la semana, sin embargo, solo 25 son facturables (recuerda que las reuniones y traslados no son laborales). Al mes logra facturar 100 horas.
Aplicamos la fórmula:
($250.000 + $1.000.000) ÷ 100 = $12.500 por hora.
Ese es el valor mínimo que debería cobrar para cubrir gastos y asegurar su ingreso esperado.
Qué errores evitar al aplicar esta fórmula
Ahora que has definido tu valor hora, es momento de exponerle tu tarifa a los clientes. En ocasiones, los freelancers temen que el precio sea un impedimento para que los clientes acepten colaborar con ellos, pero exponerlo con claridad puede impulsar la relación de trabajo, aquí algunas recomendaciones:
-Muestra que tu tarifa tenga fundamentos: Explica que el cálculo considera tus costos, el tiempo efectivo de trabajo y el valor de tu experiencia. Así, el precio deja de ser un número al azar.
-Enfatiza el valor agregado: Si entregas un servicio más rápido, incluyes revisiones adicionales o das un trato especializado, resaltalo.
-Se transparente desde el inicio: Hablar de precios con claridad genera confianza y evita malos entendidos. Puedes dar un valor estimado por hora y luego adaptarlo según el alcance del proyecto.
En la sección de herramientas digitales de Valor Pyme encontrarás soluciones que, aunque no son calculadoras directas de tarifas por hora, sí apoyan el proceso de ordenar tus finanzas y justificar tu valor:
Defontana y Fintelligence: plataformas de gestión y contabilidad que te permiten tener claridad de tus ingresos y gastos en tiempo real, algo clave para ajustar tu tarifa con argumentos sólidos.
Test de nivel de digitalización: te orienta en qué herramientas digitales implementar para mejorar tu productividad y, en consecuencia, administrar mejor tu tiempo.
En Chile, cada vez más profesionales independientes y pymes están entendiendo la importancia de cobrar lo que realmente corresponde. La buena noticia es que no tienes que hacerlo solo: existen comunidades y herramientas que te acompañan en este proceso.
Si quieres recibir consejos prácticos, acceder a recursos útiles y ser parte de una red que apoya tu crecimiento, suscríbete al blog de Valor Pyme. Allí encontrarás más herramientas, experiencias y acompañamiento para hacer que tu negocio avance con seguridad.