Durante mi paso por la Universidad de Pennsylvania, tuve la suerte de tomar un curso de pregrado (con alumnos “jóvenes” de muchas carreras diferentes) con el profesor Karl Ulrich, un experto en emprendimiento y diseño. No es una sorpresa que el curso se tratase de diseñar productos innovadores que realmente solucionen problemas, ¡duh!
Mi objetivo en el siguiente artículo es repasar algunos de los principales consejos que revisamos en el curso. Esto, principalmente, para emprendimientos tradicionales enfocados en diseñar productos físicos (pero también es extrapolable a software).
El punto de partida: un dolor del cliente
Si estás pensando en comenzar un nuevo emprendimiento o diseñar un nuevo producto, la clave es partir desde el dolor. Pregúntate: ¿Qué quiero solucionar? Hay que pensar en problemas, molestias o algo que queramos hacer más eficiente en nuestra vida diaria. No saltes de inmediato a una solución específica, ya que esto podría limitar el alcance de tu idea.
Un mal ejemplo: Desearía tener una bolsa que pueda contener todo lo que necesito al pasear a mi perro (este ejemplo es malo porque salta a una solución específica demasiado pronto).
Un buen ejemplo: Me cuesta llevar todo lo que necesito cuando paseo a mi perro: correa, bolsas, botella de agua, palito, billetera, teléfono, etc.
Elaborando una Declaración de Problema
Los diseñadores utilizan Declaraciones de Problema para definir el problema que están intentando resolver. Este debe comenzar con “¿Cómo podríamos…?”, ser centrado en el usuario, no apuntar a una solución específica y lograr equilibrar entre ser demasiado amplio y demasiado específico.
Un mal ejemplo: ¿Cómo podríamos rediseñar la correa de perros para transportar todas las cosas colgando de la correa? Es malo porque no identificamos a un usuario, rápidamente saltamos a una solución y es demasiado específico.
Un buen ejemplo: ¿Cómo podríamos ayudar a dueños de perros a caminar más tranquilos con todo el equipamiento requerido? Es bueno porque identificamos al cliente, no apuntamos a una solución específica y es suficientemente amplio para abordar el problema.
Valida tu Declaración de Problema con la técnica de los 5 “Por Qués”
Para profundizar en el problema, utiliza la estrategia de los 5 “por qués”. Pregúntate repetidamente “¿Por qué me gustaría hacer eso?” Esto te ayudará a entender mejor el dolor y a abordar soluciones más efectivas.
¿Por qué queremos ayudar a dueños de perros a caminar más tranquilos con todo el equipamiento requerido? Porque queremos que los dueños caminen sin tener que cargar tantas cosas incómodas o perder algo.
¿Por qué queremos hacer eso? Porque así los dueños de perro pueden estar más tranquilos al pasear a sus animales.
¿Por qué queremos hacer eso? Porque queremos que la experiencia de pasear perros sea placentera y sin complicaciones.
¿Por qué queremos hacer eso? Porque cuando las personas están relajadas disfrutan más del tiempo con sus mascotas.
¿Por qué queremos hacer eso? Porque queremos fomentar el vínculo positivo entre dueños y sus mascotas, mejorando su bienestar mutuo.
Con esto, logramos generalizar la declaración del problema, lo que nos ayuda a abrir opciones. Podemos ahora abordar el dolor original (que es pequeño) de una manera más amplia. Por ejemplo, ¿Cómo hacemos que los dueños de perros estén más cómodos al caminar? Tal vez ni siquiera tenemos que pensar en la correa o los aparatos.
El rol de la empatía
El diseño de productos implica concebir y dar forma a artefactos que resuelvan problemas, considerando su producción para ser utilizados por muchas personas. Por otro lado, el pensamiento de diseño es el proceso de desarrollar una idea en un producto, siguiendo un marco establecido.
La empatía significa comprender y experimentar vicariamente los sentimientos, pensamientos y experiencias de otro. En palabras del profesor Ulrich: “Diseña para los extremos y el resto se cuidará solo”. Esto quiere decir que, en vez de enfocarnos en un producto que le sirva a todo el mundo, tenemos que enfocarnos en solucionar un dolor para alguien que realmente lo sufra!
Entrevistas etnográficas y citas rápidas de investigación de usuario
Las entrevistas etnográficas son informales y con preguntas abiertas. El objetivo no es obtener respuestas que quieras escuchar, sino abrir espacio para historias y respuestas amplias.
Un ejercicio interesante es la cita rápidas de investigación de usuario. Crea una serie de preguntas cuidadosamente construidas para investigar tu declaración del problema. Entrevista a otros y toma notas para probar tus suposiciones sobre el dolor identificado.
Si preguntas: “¿qué llevas contigo cuando paseas a tu perro?”, te responderán:
“La correa, bolsas para recoger desechos, y mi teléfono.”
Si preguntas: “Cuéntame sobre tu experiencia al pasear a tu perro…”, te responderán:
“Cuando salgo, primero me aseguro de que la correa esté lista y ajustada. Siempre llevo bolsas para los desechos en mi bolsillo, pero a veces se me olvidan, lo cual es frustrante. También llevo mi botella de agua porque mi perro se cansa rápido. Mientras caminamos, me preocupo de que no se me caigan las llaves o el teléfono, lo cual pasa seguido porque no tengo dónde guardarlos. Además, a veces me gustaría tener una forma más fácil de llevar los premios para entrenarlo mientras caminamos.”
La innovación comienza con la empatía y la comprensión profunda del problema. Antes de saltar a soluciones, pregúntate: ¿qué problema estoy resolviendo y a quién le sirve? Diseñar un producto innovador no es solo una cuestión de técnica, sino de verdaderamente conectar con las necesidades del usuario!
